La verdad es que nunca había pensado en tener que ir a un psicólogo/a ni lo había imaginado, hasta que por necesidad tuve que buscar a uno/a.

Mi suerte fue encontrar a una psicóloga como Marina. Desde el primer día te sientes muy cómoda con ella. Es una persona dulce, amable, cariñosa y con mucha empatía.

En mi caso, llevo un año con ella como psicóloga, y la verdad es que no la cambiaría por ningún otro.

Poco a poco he ido avanzando y mejorando, y pienso que parte de ello también es gracias a su actitud hacia sus pacientes. Siempre te motiva, te da herramientas para mejorar y el hecho de que esté pendiente y te escriba para ver cómo estás y se interese por ti, eso ayuda muchísimo.

Sólo tengo palabras bonitas hacia ella y sobre todo agradecimiento por todo lo que ha hecho y hace por mí. La recomiendo 100%.

Conocí a Marina a través de un buen amigo que me la recomendó, ya que a él le había ayudado mucho.

Marina me leyó la carta natal y desde el principio me sentí muy cómoda con ella. Se le notaba con experiencia y con mucha empatía y nivel de escucha. Me ayudó a entender situaciones que tenía que solucionar. Hice caso a sus recomendaciones y me ha servido mucho para mi crecimiento personal.

Una suerte coincidir con ella, es una gran profesional.

¡Gracias! Marina.

Hace aproximadamente un año que tengo sesiones con Marina. Le escribí porque quería empezar a hablar con alguien externo a mi vida y que fuese un profesional para darme sus puntos de vista y cuestionarme cosas sobre mis experiencias y cómo estaba sintiéndome.

Ella me ha ayudado muchísimo a desarrollar mi inteligencia emocional y a darme cuenta de cómo me afecta lo que sucede a mi alrededor y cómo gestionarlo. Soy una persona que se piensa mucho las cosas y que cree que ha barajado todas las opciones en diversas ocasiones.

No obstante, con temas importantes para mí, Marina ha sabido hacerme las preguntas indicadas para romperme todo lo que yo pensaba que tenía establecido y hacerme ver cosas que ni sabía que estaban allí, abriendo así una puerta a nuevos pensamientos.

He tenido mucha suerte al dar con Marina, ya que me entiende al hablar y me escucha de manera activa y atenta. Sin ninguna duda, los avances positivos a nivel de salud mental, conocerme a mí misma y aprender a saber qué cosas quiero y cómo hacerlo, han sido con su ayuda.

Mi experiencia con Marina fue muy amena y cercana desde que contacté con ella, por una recomendacion de una persona próxima a mí que me explicó su trabajo en relación a la carta astral, lectura de la misma, revolución solar, etc.

Primero la contacté para preguntarle sobre qué datos necesitaba para hacer la lectura de mi carta natal y una vez le di los datos necesarios, me la preparó y me la envió por correo electrónico para que yo la leyera antes de la sesión presencial y así poder consultar mejor mis preguntas o dudas sobre la misma.

Finalmente, llego el día de ir a la consulta presencial y la verdad es que me sentí en mucha confianza con ella desde que llegué a la sesión, en la cual me fue explicando más a fondo todas las connotaciones que encontré en la lectura de mi carta y así poder entender mejor los comportamientos, miedos, sensaciones que uno como ser humano tiene.

En lo que a mí respecta, después de haber leído por primera vez mi carta natal, vi reflejada la historia de mi vida y llegué a entender muchos de mis comportamientos, mi manera de actuar ante determinadas situaciones y pude asimilar que aun tengo cosas que trabajar dentro de mí, para estar bien conmigo misma y con los demás.

En la sesión tuve sentimientos reencontrados, heridas que aun están por sanar y también se me salieron las lagrimas Para mí como experiencia, fue muy buena y cercana ya que el tiempo se pasó volando y hoy por hoy intento introducir en mi vida lo que tengo que mejorar en mí y los miedos que he de trabajar. Gracias Marina :).

Conocí a Marina a través de una amiga. Llevaba meses con necesidad de saber de mí a través de mi Carta Natal, así que esta amiga me habló de Marina y su profesionalidad, y me puse en contacto con ella. Fue muy cercana, agradable y entregada. No solo confeccionó mi carta natal, sino que me ayudó con posterioridad para aclarar dudas y enseñarme a entenderla.

Conocer mi carta natal me ha proporcionado autoconocimiento y ha pasado a ser mi hoja de ruta, a la que vuelvo cada vez que me siento perdida. Me ayuda como herramienta para volver a encontrarme cuando así lo necesito.

Gracias por todo Marina y un abrazo.

El primer encuentro que tuve con una psicóloga a principios de los 90 fue bastante desagradable. Yo no tenía muy claro en qué consistían esas terapias, estaba pasando mi primera depresión reconocida y no me gustó la forma con la que me atendieron en las primeras sesiones. La segunda psicóloga que tuve me gustó más, tuvimos una relación más beneficiosa para mí, aunque no era la relación que yo tengo ahora con Marina, de complicidad, era más bien una relación de experta y paciente.

Hace unos dos años, en una red social, descubrí que soy altamente sensible y allí descubrí las respuestas de la psicóloga Marina ante preguntas sobre el tema de la alta sensibilidad, y me parecieron muy interesantes.

Enseguida quise tener contacto privado con ella para ver si podía ayudarme en el momento de duelo que estaba atravesando por la reciente muerte de mi primer hermano. Necesitaba ayuda antes de caer en una depresión más profunda.

Desde el primer contacto se creó el feedback que creo normal y necesario entre paciente y terapeuta. Con Marina he conseguido dejar de dramatizar mi situación e ir aprendiendo herramientas para controlar mis emociones en situaciones límite y aprender a evitar que personas que no me aportan nada a nivel anímico me hagan daño. Puede que por mi tipo de perfil no consiga un absoluto dominio de mis emociones, pero al menos con Marina he aprendido a no hundirme anímicamente cuando atravieso momentos difíciles.

Doy gracias a Marina por ayudarme a entenderme mejor y a no sentirme mal cuando las cosas no van bien. Creo que es una persona muy preparada y es de lo más competente que he encontrado.

No se queda solo con escucharte, sino que te da herramientas para ir avanzando.

Llevo varios años haciendo terapia con Marina. Tenía problemas con la organización y la autoconfianza y gracias a ella y a su forma de acompañarme, he conseguido poder poner orden a mi vida, tener más confianza en mí misma y darme el valor como persona para mejorar mi autoestima.

Gracias Marina.

La palabra que mejor define mis sesiones con Marina es confianza. Desde el minuto cero te sientes bien con ella y te enseña a sacar lo mejor de ti y a entender que no puedes controlar algunas de las cosas que pasan a tu alrededor, y que por lo tanto, aunque no sean del todo buenas, aprendes a llevarlas mejor y a no dejar de ser feliz, aprendes a convivir con ellas y a no caer en el pesimismo o la tristeza. A su vez, si caes, te enseña también a ver que somos humanos y que son cosas naturales que no nos tienen que hacer sentir mal.

Cuando estaba decidiendo si ir o no a las sesiones tenía muchas dudas, hacía tiempo que lo pensaba y no lo tenía claro, le di muchas vueltas y era reticente. Cuando finalmente me decidí, vi en la primera sesión que no me había equivocado.

¡Estoy muy contenta de haber ido! ¡Gracias Marina!

Marina lleva siendo mi psicóloga hace más de un año, y le agradezco mucho haberme ayudado en los momento más difíciles. Ha sido una gran base de apoyo y me ha ayudado a ver situaciones desde una perspectiva diferente.

Encontrar a Marina ha sido un punto de inflexión en mi vida. Gracias a ella he aprendido a ver lo que me sucede con otros ojos y a actuar de una manera distinta, conectando más conmigo misma y menos con lo que los demás esperan. Marina es cercana, amable y concisa, y su empatía y sensibilidad me han ayudado a mostrarme al completo, sin miedo a ser juzgada.

Muchas gracias Marina.